José Watanabe nació en Laredo (Perú) en 1945 y murió en Lima en 2007.
Deja el cayado clavado en el limo.
El vado
Si vas por la playa donde se vadea el río
verás,
plantadas en el limo,
largas varas de eucalipto. Están allí
para los caminantes que van a la otra ribera.
Una será tu cayado:
con ella tantearás, sin riesgo, un camino
entre las aguas turbias
y las piedras de resbaloso musgo.
verás,
plantadas en el limo,
largas varas de eucalipto. Están allí
para los caminantes que van a la otra ribera.
Una será tu cayado:
con ella tantearás, sin riesgo, un camino
entre las aguas turbias
y las piedras de resbaloso musgo.
Cuida de dejar hundida la vara
con gratitud
en la otra orilla: otro viene:
acaso mi padre
que en las tierras amarillas busca sandías silvestres,
acaso yo
que regreso, retrasado y viejo,
mirando ansioso mi pueblo que tras el río
ondula o se difumina en el vaho solar.
Allí,
según costumbre, sembraron mi ombligo
entre la juntura de dos adobes
para que yo tuviera patria.
con gratitud
en la otra orilla: otro viene:
acaso mi padre
que en las tierras amarillas busca sandías silvestres,
acaso yo
que regreso, retrasado y viejo,
mirando ansioso mi pueblo que tras el río
ondula o se difumina en el vaho solar.
Allí,
según costumbre, sembraron mi ombligo
entre la juntura de dos adobes
para que yo tuviera patria.
Deja el cayado clavado en el limo.
UBERA
Ibaia zeharkatu ohi den hareatzatik bazoaz,
han ikusiko dituzu
lokatzetan tinkaturik
eukaliptozko makila luzeak.
Han daude
uraren beste ertzera doazen ibiltarientzat.
Haietako bat izanen
da zure makulua:
harekin haztatuko duzu, arriskurik gabe, bide bat
ur uherren eta
goroldio labaingarrizko
harrien artean.
Ez ahaztu gero makila tinkaturik uztea
esker onez
uraren beste ertzean: beste norbait dator:
beharbada gure aita,
lur laruetan basa angurrien bila dabilela;
beharbada ni,
bueltan natorrela, zahartu eta berandutua,
nire herriari grinatsu
begira, nola ibai ostean
izurtzen den edo eguzki-lurrunean lausotzen.
Hantxe,
ohituraren aginduz, lurperatu zuten nire zilbor-hestea
bi pezoren arteko
junturan
nik aberria izan nezan.
Utzi ezazu makila lokatzetan tinkaturik.
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